¿Por que pensaste que la historia
quedaría por siempre igual?
¿Que la hipocresía engendraba,
naturalmente, mas hipocresía
y tu realidad estaba condenada
a un perfecto y hermético silencio?
La vida esta llena de estas cosas
de sueños, estafadores de ilusiones
de terribles dioses
e imperfectibles fantoches.
De mediocres susurros.
De decepciones y pasiones.
(Siempre el que se rebela
es ese pobre, al que le falta solo un instante
para terminar en el lodo)
Nos miramos a los ojos, amor.
Y nos prometimos todo.
Exactamente todo
lo que no íbamos a cumplir.
Pero la vida es así:
es la sed la que domina
y en derredor
se arma, falazmente
ese burdo cuento
al que llamamos destino...
Quien tiene la ultima palabra
también dispara, por defecto, la palabra justa.
Y esto, lo nuestro,
no fue otra cosa que una trama de mentiras
exquisitamente armadas.
para el oído desatento.
